Avisar aos parceiros da sua IST é tão importante quanto tratá-la

Contarle a tu pareja sobre tu ETS es tan importante como tratarla.

A nadie le alegra que le diagnostiquen una infección de transmisión sexual (ITS). Pero es aún menos así para quienes se reinfectan con esa misma ITS.

Si quieres saber qué hacer para evitar una situación como ésta, debes saber que hay más que solo condones.

Para entender la dinámica de propagación de las ITS en una población, primero es necesario comprender que en cada ciudad o región existen redes de personas que interactúan sexualmente entre sí a lo largo de su vida, haciendo que estos virus y bacterias circulen y se transmitan entre las personas.

Por esta razón, es intuitivamente razonable suponer que en redes más densas, con miembros que mantienen relaciones sexuales e intercambian parejas con mayor frecuencia, la circulación de estos agentes infecciosos tiende a ser mayor. Por el contrario, en redes más flexibles, con menos interacciones entre personas, la propagación de las ITS suele ser menos eficiente.

Sin embargo, otros factores influyen en esta ecuación, pero no siempre son inmediatamente evidentes para las personas. Uno de los clásicos es lo que en epidemiología llamamos rastreo de contactos , pero para facilitar su comprensión, lo simplificaremos a «notificar a las parejas».

Por definición, el rastreo de contactos es el acto de, ante un individuo con una enfermedad transmisible, mirar también a los miembros de esa red a la que pertenece para identificar a aquellos que también pueden estar infectados con el mismo virus o bacteria en cuestión.

Durante la pandemia de COVID-19, cuando enfermamos de coronavirus, todos aprendimos rápidamente la importancia de avisar a nuestros amigos y familiares con quienes habíamos estado en contacto cercano. Por otro lado, cuando alguien tiene una ITS, por miedo a ser juzgado, por desconocimiento o incluso por vergüenza, es común ver que simplemente no le cuentan a sus parejas sobre la ITS.

Sin embargo, recordando que las ITS se propagan a través de redes, lo que estas personas no se dan cuenta es que al no avisar a su(s) pareja(s) están aumentando las probabilidades de volver a infectarse con estas mismas ITS en el futuro.

Al hacer este anuncio, un buen consejo es dejar claro que no la estás contactando para culparla por la ETS diagnosticada, sino porque te preocupas por ella y su salud.

Algo sencillo funciona bien. Por ejemplo:

Cariño, te escribo para contarte que, después de empezar a salir, descubrí esta ETS. Ya me he tratado y estoy bien. No te escribo para acusarte de nada, sino para que investigues esto y te asegures de que tú también estás bien. Besos.

Aunque no lo parezca, un acto tan simple como éste es tan importante como tratar una ITS recién diagnosticada para controlar nuevos casos de ITS en una comunidad.

Reflexiona sobre el asunto y trata de convertirlo en una rutina en tu vida.

Regresar al blog